Quemando etapas:
Doy por finalizada la primavera, ya se ha instaurado el verano, con todo lo que esto conlleva.
Supongo que es hora de cambios,en mi casa, en mi hogar y en mí misma.
He de hacer todo lo que en la primavera quedó pendiente, tal vez por falta de tiempo o de estímulos.
Aprovecharé las vacaciones para ponerme al día: desalojar de trastos inútiles mi casa( y tal vez mi alma), viajar un poco, ver a familiares , amigos y establecer nuevos objetivos realistas y más optimistas.
Quizás deba comenzar por los abandonados cajones de mi cómoda, tan en desorden como mis olvidados y caducos sueños.
Luego seguir con toda la ropa en general, la de el menage, sábanas, toallas, reagrupar y clasificar lo inservible y no útil, y guardar definitivamente lo cercano al invierno.
Por mi condición de friolera siempre he querido tenerlo a mano, pero actualmente es ya un estorbo, ( como mis caducos sueños primaverales en pleno verano).
Tampoco quiero demorar demasiado el arreglo de los pequeños desperfectos de mi hogar- casa. Siento que han transcurrido siglos desde que se ha instaurado este progresivo abandono, ( tanto de mi misma , como de mi actual hogar , reflejo de un estado de ánimo , y de una ausencia de fluir quizás en la dirección adecuada).
Pero no quiero lamentarme de mi pasado y presente, supongo que todo esto tiene un sentido, y estoy alegre de sentir un despertar, aunque sin abandonar mi sutil tendencia a seguir soñando aunque sea " un poco más despierta".
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La palabra siempre puede ser el vehículo de bellos sentimientos. Un abrazo.