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viernes, 21 de septiembre de 2012

Nada que contar


acaban de llamar

a la puerta

era el

hombre

de la

venta

de congelados

a domicilio.


Esta vez si le compré algo.

Simpre con esa mirada tan triste...

como dando pena


Como diciendo, mira, este

es mi trabajo,

yo vivo de esto.


Ya va tres veces o así que me disjeste

que no necesitabas mas congelados.


Y era varad, tenía lleno el congelador.


Hoy por fin tuvo

Suerte, el hombre de los congelados.


Y me llevé bastantes cosas.

sobre todo pescados

y verduras.


Enfín me gusta muchísimo más lo fresco.

pero tner cosas en la nevera

congeladas, siempre

tiene sus ventajas.


Y me gsuta tener simpre lleno

el Congelador

Aunqnue sea incluso

congelando cosas Frescas.


Me refiero a la carne

y el pescado, aunque creo que

las verduras también tan muy buenas.


Cuando los decongelas

están igual, casi igual de sabor,

incluso muy ricos.


Según de la Frescura que ya

Gozasen antes de la Congelación.


Y si es de fuera y se rompió o no la cadena del frió.







7 comentarios:

  1. La cadena de frío nunca se pierde, la del vendedor de congelados tampoco.

    Besos.

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    Respuestas
    1. Bueno, Sarco, esto no es nada poético, es verdad que viene una furgoneta vendiendo "congelados a domicilio" y yo le compro con frecuencia.
      En realidad no creo que haya ninguna cadena, como no sea "la cadena del frío".
      Y sí,que se puede romper perfectamente esta cadena. De muchísima maneras.
      Tampoco creo que haya ninguna cadena entre el vendedor de congelados y yo, el necesita vender y por ahora le compro,porque me gustan sus productos y por comodidada, pero esto no tiene por que ser siempre eterno, muchas circunstancias podrían cambiar esta situación.
      Y desde luego él se tendría que buscar la vida, me refiero a seguir vendiendo sus productos por otros lados.
      Supongo que le costaría, porque en ele vecindario la genta prefiere los congelados del supermercado( porque son mas baratos ) y yo pues a veces también los compró allí, aunqnue reconozco que tienen mayor calidad los suyos,pero si dejase de comprarale ya se buscaría la vida por otro lado, eso estoy seguro, y se rompería la supuesta cadena.
      Pero vamos, que no es ninguna cadena.Yo no veo así, así que tampoco se rompería nada. solo se rompería el chollo de que actualemente a mi me siguen interesando sus productos y le sigo comprando de vez en cuando.
      Y su mirada triste, pues no es para menos, cada día están peor los mercados, pero bueno eso tampoco es nigún drama. Al menos yo no veo así. tendría que explorar otras áreas de mercado, y punto, es su trabajo, supongo que las encontraría.Y si lo las encuentra , cosa que dudo, pue mala suerte,quizás ese no sea mi problema, la vida está dificil, pues sí, pero tampoco hay que dramatizar.
      No obstante gracias por tu observación.
      En el fondo a mi no me cae mal el vendedor.

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    2. Una vez , no: muchas veces se va la luz en mi casa, y si estoy en casa no pasa nada , pero como esté de vacaciones , y no pueda volverla a conectar porque no estoy, pues nada se echa a perder todo lo del congelador y: "a la basura directamente todo" y te aseguro que no es nada agradable esta tarea.

      Así que fíjate lo fácil que es hasta romper cualquier cadena.

      Me estoy refiriendo a la del frío por ejemplo.

      Saludos.

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  2. Es verdad, tener cosas congeladas tiene sus ventajas, aunque la pérdida ante un corte de energía puede ser terrible en estos tiempos de crisis.
    De todas formas, es un gran avance, considerando que de un congelador sacamos lechones, vacas, pollos, pescados...verduras...
    Mientras no saquemos un vendedor...

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    1. Gracias por comentar aquí en mi blog Darío.
      Evidentemente jamás sacaremos un vendedor de un congelador, me has hecho reir.
      Y los cortes de energía, bueno pues son un rollo, unos dices que si es culpa de las compañías que generan la electricidad de las casas, otros que si cortocircuitos internos, y al final nunca se sabe.

      Saludos. Lo de " no saquemos un vendedor" me ha hecho gracia. Gracias por tu visita a mi blog, no pasa mucha gente.

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  3. No sé qué tipo de congeladores tenéis que podéis sacar de ellos vacas y lechones. En el mío apenas caben unos pocos bombones. ¡Ah! Y el salario también, claro. El pobre lleva ya unos cuantos años congelado.

    Saludos Amapola.

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    1. Gracias por tu visita, Aniki. Bueno, lo de las vacas y lechones lo dice Darío.

      Realmente esto que escribí no es nada poético, enfin lo escribí y me salió así, y cada cual le dió varias interpretaciones.

      Un saludo y gracias por comentar.Muy bonitos tus escritos y relatos y poesías.

      Bueno, lo del salario, ¿ por cierto , quien lo metió allí? eso , pues lo sacas y ya está.

      Besos, muy ingeniosa como siempre. Saludos. Lo del salario me dejó algo preocupada. Lo normal no es eso. seguro que si lo sacas de allí, se descongela un poquillo, pasa al contrario que con los alimentos que si seestropea se pudren ( si se estropea el congelador).

      Enfín, prefiero pensar Aniki, que siempre hay un remedio para todo y tú eres una persona con mucha fuerza interior. Saludos.Y sino pues te tendré que prestar de la mía, no sé..

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La palabra siempre puede ser el vehículo de bellos sentimientos. Un abrazo.