Recogió un trozo de su vida que estaba en el suelo, para seguir caminando, para encontrar un destino mejor, para que la lluvia no mojara lo poco que quedaba ya de él.
Y el destino le sonrió con un bello sol, para que su corazón jamás volviese a pasar frío en medio de la noche.
viernes, 5 de diciembre de 2014
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Para eso el bendito sol al quite salió para que no se empapara y con la vida pudiese aliarse un poco más.
ResponderEliminarSalidas
El destino, a veces. nos sonrie y nos calienta el alma.
ResponderEliminarprecioso poema.
un beso
Que bonito... si fuese una foto sería con bellos colores y luces mágicas!
ResponderEliminarBesos!
Qué regalo más hermoso, un bello sol, que le ilumine la mirada del alma ¿hay algo más inmenso que eso?
ResponderEliminarUn beso.
Al final no salió mal parado del todo.
ResponderEliminarBesos.
Fermoso relato
ResponderEliminarBesos
Oxímoron del sol y la noche.
ResponderEliminarBesos.
Un relato con un maravilloso final...........
ResponderEliminarBesos.....y feliz día
hermoso dia de sol que no se apague nunca.
ResponderEliminarbuenos dias y besos muchos
Precioso, con recompensa. Un abrazo
ResponderEliminarNunca hay que perder la esperanza. Sólo es cuestión de esperar, pero siempre llega la recompensa.
ResponderEliminarCariños en el corazón.
Kasioles
: )
ResponderEliminarMe gustó!
Besossss
...buenas noches con alegria y besosssssssss
ResponderEliminarTODO ESPERANZAS!!!
ResponderEliminarUN ABRAZO
Cuando parece que la lluvia va a estropear y marchitar el corazón, siempre aparece el sol.
ResponderEliminarPreciosas palabras, Amapola.
Un beso enorme.